Gases de efecto invernadero y la industria eléctrica
30 April 2021
El cambio climático ha sido un tema que ha cobrado una relevancia importante en las agendas internacionales, por lo que se ha buscado mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero. Estas emisiones son bióxido de carbono (CO2), metano (CH4) y óxido nitroso (N20).
En México más del 98% de las emisiones de estos gases corresponde al CO2. En 2008, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) detectó que las concentraciones de CO2 se incrementaban año con año. Se estima que este aumento se debe principalmente a las emisiones producidas por la quema de combustibles fósiles. De acuerdo con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) durante el periodo 1990-2018 la producción de energía eléctrica representó en promedio el 30% del total de emisiones de CO2 generadas por quema de combustibles fósiles. En cumplimiento a uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Ley General de Cambio Climático considera una reducción de CO2 de 22% para el 2030.
El 22 de abril de 2016, México y otros 155 países ratificaron el Acuerdo de París en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Este acuerdo data del 12 de diciembre de 2015 y fue elaborado como resultado de las negociaciones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP21).


El Acuerdo de París, entró en vigor en el 2020 y establece los trabajos que los países deberán llevar a cabo antes de que el acuerdo entrara en vigor. Por su parte, nuestro país se comprometió a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 25% con respecto a la línea base y a cumplir con un porcentaje de participación de energía limpia en la generación de electricidad del 35% en 2024 y del 50% en 2050, partiendo de una base de 20.9% de generación de electricidad limpia que existía en México en 2014, año en que entró en vigor la Ley de la Industria eléctrica (LIE).
Para el 2020, el 56% del total de la capacidad instalada en nuestro país sigue siendo de combustibles fósiles. Por ello, se debería esperar que estas emisiones vayan disminuyendo conforme más proyectos renovables se incorporen.